podría batirme a muerte con espada, indefinidamente, entre tu boca y tus ojos. se quedaría sin filo la hoja; yo estaría blandiendo el arma por siempre y sin saber
por cuál morir.
domingo, febrero 14, 2010
jueves, febrero 11, 2010
Santiamén
Dicen que el corazón se detiene (por lo menos una fracción de segundo)
entonces ya llevo tres minutos con este resfriado
¿pero qué hay de los meseros que te llevan el plato?
¿pero qué hay de los señores que te miran en el parque?
¿qué hay de las ondas en el lago
llevándote los patos
tan sólo por un trozo de pan?
miércoles, febrero 03, 2010
Jardín viejo
El gato a la sombra me ve como si no me conociera
y llevo tres años armándole su plato con leche
los nenúfares o crecen como quieren o se vuelven trampas
aprisionan a los barcos de papel
le quitan toda pizca de azul cielo a los renacuajos
en el fondo, que yo quiero decir que son carpas
la grama ya no muestra mis huellas
y
y
las garzas que veo nunca han sido garzas
ni puras
ni altas
ni siquiera blancas.
y llevo tres años armándole su plato con leche
los nenúfares o crecen como quieren o se vuelven trampas
aprisionan a los barcos de papel
le quitan toda pizca de azul cielo a los renacuajos
en el fondo, que yo quiero decir que son carpas
la grama ya no muestra mis huellas
y
y
las garzas que veo nunca han sido garzas
ni puras
ni altas
ni siquiera blancas.
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