miércoles, marzo 30, 2011

El sale volando (el pájaro incluso herido) hasta esa pequeña ciudad
o pueblo, en punto de las tres y media cuando todavía está obscuro,
y nadie dice nadie y nada despierta nada
y simplemente lo haría otra vez

El zig zag de la pestilencia va enredándose en la armadura que nadie ve
debajo del puente, arriba del canal de aguas que simplemente no deben ser
y todos fruncen el ceño y todo mancha todo
y asi es

Ella se codea con todos (la hormiga no sé si tenga codos) pero atraviesa toda la calle
y al llegar por fin ahí no la aplastan, pero le aplastan la hoja o la semillita o cualquier tonelada que llevara en sus brazos
y simplemente moverá sus antenas aunque le hayan quedado al revés.

La bocina toca con frialdad y los callejones le llevan el eco a cualquiera que no quiera escuchar.

El accidente aquí, la desgracia allá

La casi atropellada (una niña linda de cortísima edad) que del susto tiró su flor.

Y el aire volteó al bote de basura

Y el auto va chorreando aceite por donde quiera

Y se incendia

Y le robaron sus discos

Y (fatídicamente) a la librería nunca le regresaron su libro..

qué jodienda!

yo por eso (él)... regreso a casa y apenas cruzo la puerta, cierro los ojos para buscar tu perfume y sonreir
y simplemente...sonreir.

viernes, marzo 04, 2011

Me la imaginé en plena madrugada

Me la imaginé en plena madrugada

Cortada por cada extremo
y al centro engrandecida
su veneno, por supuesto
la soga de su cuello en toda la extensión de un beso
el fantasma del sigilo
las huellas de su baño tibio.

Me la imaginé toda ruborizada
esa sangre fluvial de hilo
ella sin refugio apretándome
y yo sin alivio… escuchándole:
eres mío
eres mío
eres mío.